domingo, 20 de marzo de 2016

Para aquellos a quienes recomiendo fibra

Hay gente que va por la vida con un aire de superioridad infame. Creen ser mejores y, lo que es peor, se creen en su derecho de ir dando lecciones por la vida como si fuera su obligación. ¿En qué momento se les ha dado la varita mágica para hacerlo? ¿En qué momento se les ha concedido ese rol? Todos estamos hechos de la misma pasta.Cada uno lleva su vida como buenamente quiere o puede. La felicidad, la educación y, especialmente, los valores los moldea cada uno, no sólo por lo que le han enseñado, aquí también juegan un papel muy importante la empatía y la bondad. Para mí, alguien superior es quien, a su manera y sin hacer daño a nadie, sabe ser y hacer feliz a quien tiene a su lado, quien enseña sin querer miniaturizar a quien aprende, quien hace las cosas por el puro placer de ayudar a engrandecer al otro. En definitiva, quien sabe que con un simple gesto amable puede cambiar el día de quien tiene a su lado.
A quienes van por la vida con ese aire de superioridad faraónica, les recomendaría que desayunen fibra.


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